Tautologías

El Gobierno vasco ha llenado las calles de la comunidad autónoma con carteles como el que muestran en la foto de Mitxi el consejero de Interior, Rodolfo Ares, y la directora de Atención a las Víctimas de la Violencia de Género, Mariola Serrano.

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El cartel muestra a un tipo, malencarado y sin afeitar, aunque sin cargar las tintas, en las fotos que se hacen en las dependencias policiales a los detenidos para la ficha, con las medidas detrás. En el pecho, en lugar de llevar un número, lleva algo que parece una pizarra, en la que puede leerse:

"El que maltrata a una mujer es culpable".

Tautología se llama esa figura. Debe de querer decir que maltratar a una mujer no es una actividad lícita, porque esa frase sólo tiene sentido si se aplica a una acción que no goza del beneplácito social. Imaginen, por ejemplo, esa construcción en esta variante: "El que ayuda a un ciego a cruzar la calle es culpable" o "el que bebe agua es culpable". Carecerían de sentido.

O sea, que maltratar a una mujer no está bien, pero parece muy poca información. No dice más que: "El que maltrata a una mujer maltrata a una mujer". También podríamos decir: "El que cruza con el semáforo en rojo es culpable". Las culpabilidades no son intercambiables ni tienen la misma pena. No es lo mismo una cosa que otra.

Seguramente no está en la intención de los autores del cartel, pero el hecho de que en el estado actual de las cosas, basta la denuncia de una mujer para que un varón cualquiera pueda verse en el trance del modelo de la foto, puede sugerir otra lectura: "El que es acusado de maltratar a una mujer es culpable". Éste eslogan sí tendría sentido, miren.