No era esto, no era esto

La vida nunca se resuelve tal como esperamos. Cuando el poeta escribía "Que las calles amanecen rojas de banderas" no quería, seguramente, decir esto. Kosovo es ya un país independiente y el presente enunciado constituye en sí mismo prueba incontestable de que el presidente del Gobierno era un adelantado en la tarea de dotar al lenguaje de una polisemia total.

Es una paradoja que se apunta en el artículo de Daniel Reboredo, en El Correo. Un país independiente que depende económicamente de los fondos de la Unión Europea. Una independencia que depende para su defensa de las tropas multinacionales. De todos los modelos que nuestros nacionalistas han tenido como referentes, (véase el link del comentario de ayer) ninguno tan poderoso como éste. Que nos paguen y nos defiendan la independencia. Una independencia sin responsabilidad, subvencionada y tutelada por el exterior frente a agresiones externas, un chollo. Se lo decía Clint Eastwood a Eli Wallach en 'El bueno, el feo, el malo': "Voy a dormir muy tranquilo, Tuco, porque sé que mi peor enemigo vela por mí.

Moratinos compara Kosovo con Irak, aunque, tal como señala el editorial de El Mundo, si tal fuera cierto, el Gobierno debería ordenar el regreso inmediato de las tropas. El PNV saluda una independencia conseguida "sin un sólo tiro", descripción notable para un fruto político de la guerra de los Balcanes. No tienen ejército, y es comprensible si se tiene en cuenta que sus especialistas están desplegados por aquí, asaltando chalés en los alrededores de las grandes ciudades.

El diario El Correo trae hoy, además del señalado, dos artículos soberbios: Florencio Domínguez y José María Ruiz Soroa.

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La dimensión humana de los candidatos

Pie de foto.-El presidente, la feliz gestante y el garante

Carme Chacón se explica en La Vanguardia, según la noticia que nos trae Balsera. Los candidatos (y las candidatas, claro) tienen sus aspectos humanos y éste es un acervo al que muy legítimamente quieren sacarle partido electoral:

"Cuando llama el presidente del Gobierno, lo primero que dice Zapatero es: ¿Cómo está nuestro niño?", explica Chacón, quien ase guró que, cuando ganó las elecciones generales de 2004, le pidió trabajar sin tener que renunciar a la maternidad. "Me dijo: 'Vamos a trabajar, a trabajar mucho, pero sólo te pido una cosa, que no renuncies a lo más lindo que le puede pasar a una persona, que es tener hijos'", añade.

Ésta es una de esas ocasiones en que es perfectamente comprensible el lenguaje figurado, "nuestro niño", ahórrenme los chistes zafios. "Nuestro niño" es en sentido estricto de Carme Chacón y Miguel Barroso. Lo que impresiona es la segunda parte del párrafo, esa particularidad de transmitir la palabra revelada por otro, ese "me dijo".

No era Suso de Toro. Observen ese calificativo, "lindo", que denota sus ascendencias culebronas. Una vez pasado el momento místico, la ministra de Vivienda se apea de la lírica y vuelve a la campaña épica:

Chacón también expresa su deseo de que los líderes del PP, Mariano Rajoy y Eduardo Zaplana, "hablen de pañales", y dice sentirse "más afortunada que otra cosa" por su embarazo. "Tengo ganas de ser madre y de ejercer como tal, así que, al igual que muchas luchadoras, sacaré tiempo de donde sea".

Ejemplar, aunque impreciso. ¿Más afortunada que "qué otra cosa"? Rajoy y Zaplana probablemente deberían hablar de pañales, pero quizá debería exigírselo antes a sus pares en el Consejo de Ministros y Ministras, con el fin de rebajar el IVA al 4%.