El último MacGuffin

Las ministras de Sanidad y de Igualdad convocaron ayer a los medios de Comunicación. Ellas habían oído que hoy se iba a celebrar un Debate sobre el Estado de la Nación y se dijeron: "¿Cómo que la nación está en estado? Eso lo arreglamos nosotras" . Pensat y fet.

Esta versión es la única que se me ocurre para rechazar la tentación de pensar que nos está gobernando una cuadrilla que es capaz de cualquier cosa, por incongruente, aberrante o estúpida que parezca con tal de ahorrarse un sofocón.

O sea, que llevamos años tratando de inocular entre ciudadanos hechos y derechos de los riesgos y las inconveniencias de la automedicación y se va a poner a disposición de las adolescentes sin exámenes, sin preguntas, sin explicaciones, una píldora que es una bomba hormonal, sin que nadie le pregunte si incurre en algunas contraindicaciones par el principio activo de la píldora, ni la advierta de algunos posibles efectos secundarios negativos, como por ejemplo:

Reacciones adversas:
Comp.: náuseas, dolor hipogástrico; fatiga; cefalea; sangrado no relacionado con menstruación. Implante: depresión, modificaciones del estado de animo y libido; migrañas; palpitaciones, dolor torácico; HTA, venas varicosas; disnea; molestias
abdominales; acné, dermatitis de contacto, alopecia, hipertricosis, exantema, prurito, cambios de pigmentación; síntomas urinarios; vaginitis, quistes ováricos, nódulos mamarios benignos, secreción mamaria; picor en lugar de inserción, dolor de espalda, pérdida de peso.

La misma farmacia que va a vender esa bomba a una muchacha de quince años, le negará un Nolotil' para combatir la cefalea que le ha provocado la píldora postpolval. No hablemos de lo que le puede caer al hostelero de al lado, si se le ocurre servir a la niña una caña de cerveza o le vende un paquete de cigarrillos. ¿Cómo se puede sustraer al conocimiento del médico el número de píldoras postcoitales que puede consumir una mujer, sin examen ginecológico y sin mayor trámite que el pago de los veinte euros que va a costar?

Un efecto inevitable de esta medida va a ser un aumento de la ya de por sí alarmante irresponsabilidad con que un número alto de adolescentes afrontan las relaciones sexuales. Si antes no se reocupaban del condón, ahora menos. Estos son datos del propio Ministerio que ahora regenta Doña Jiménez, así como el alarmante número de embarazos adolescentes. Esto, que justificaba la idea de plantear una corrección en la información y la educación sexual de nuestros hijos -que no se planteó- y lanzar una campaña para divulgar el uso del condón, que sí se hizo, aunque fuera con aquella horterada rap de "sólo con condón, sólo con koko".

No se trata ya sólo de la banalización de las relaciones sexuales. Si esta medida se pone en marcha, puede darse el aumento de enfermedades venéreas entre los jóvenes. El condón prevenía el embarazo y las ETS. La píldora, evidentemente, no. Pero es una gesta progresista. Aitor Mento supo verlo ayer al escribir: "Grandes hazañas: El PSOE y la toma de la Pastilla".

Y todo para cambiar de conversación. Este presidente del Gobierno es un 'troll' en la política nacional, alguien cuyo objeto no es otro que interrumpir el discurso de la oposición en esa conversación reglada que es la política en democracia. Cada vez que hay una dificultad, una provocación. "Nunca busca una solución, sino un enemigo", cuenta Del Pozo que le dicen sobre la estrategia presidencial.

La Toma de la Pastilla es lo que Hitchcock definía como un MacGuffin. En 'El cine según Hitchcock', la larga entrevista que le hizo François Truffaut, explicaba en qué consistía esta martingala de introducir en la historia una trama muerta, que no interesa nada para explicar la historia, pero tiene entretenidos a los espectadores y absorbe su atención para que no se la presten a la trama principal del la película. "Imagínese a dos hombres en un compartimento de un tren. El primero dice:

-Perdone mi curiosidad, pero qué lleva en esa maleta tan grande?

-Es un MacGuffin.

-¿Y qué es eso?

- Una herramienta para cazar leones en las montañas Addirondack.

-Pero en las Addirondack no hay leones...

-Ah, entonces tampoco es un MacGuffin.

"Dos ministras vestidas de boda", describe Hermann Tertsch. Las dos ministras parecían más bien las protagonistas de aquella novela de Ruth Rendell, 'Un juicio de piedra', que Claude Chabrol adaptó al cine con el título de 'La Ceremonia' e interpretaron en su versión original Isabelle Huppert y Sandrine Bonaire.

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Buzón de sugerencias

Lección 2ª.- Las palabras de un gobernante son actos políticos. Por eso, cualquier lehendakari antes de hablar ha de pensar bien lo que va a decir y sería muy recomendable contrastar el discurso con la propia hemeroteca.

Caso práctico de hoy.- El Mundo transcribió ayer unas declaraciones del lehendakari que encabezaba el siguiente titular:

El lehendakari, Patxi López, cree que "algo se mueve" en el entorno de ETA, aunque es entrar en "el terreno de la especulación".

Respetable y respetado lehendakari: “Entrar en el terreno de la especulación” emparenta con “voy a arriesgar para conseguir la paz”, que dijo la semana pasada. Los gobernantes sensatos actúan sobre seguro: no apuestan ni arriesgan y hablan de lo que conocen positivamente; no 'especulan'.

El 14 de septiembre de 2005, usted mismo había dicho que se apreciaban:

"indicios de que algo se mueve y alguna reflexión hay en la izquierda abertzale"