Y estos dos, ¿de qué se ríen?

El presidente boliviano fue agasajado en Madrid por todo lo alto: entrevistas con el Rey y el presidente del Gobierno, cena de gala en la Zarzuela y rueda de Prensa conjunta con Zapatero. No acierto a imaginar cómo vamos a manifestar nuestra alegría el día que nos visite Barack Obama, tal como se preguntaba razonablemente Carlos Herrera hoy.

Desde aquí propongo una cadena humana agitando las banderitas de papel de las barras y las estrellas entre Torrejón yla Moncloa. El personal será convenientemente adiestrado para cantar aquella cancioncita de Lolita Sevilla en 'Bienvenido, míster Marhall':

"Los yanquis han venido,

olé salero, con mil regalos,

y a las niñas bonitas

van a obsequiarlas con aeroplanos,

con aeroplanos de chorro libre

que corta el aire,

y también rascacielos, bien conservaos

en frigidaire ."

"Americanos,

vienen a España

gordos y sanos,

viva el tronío

de ese gran pueblo

con poderío,

olé Virginia,

y Michigan,

y viva Texas, que no está mal,

os recibimos

americanos con alegría,

olé mi mare,

olé mi suegra y

olé mi tía."

"El Plan Marshall nos llega

del extranjero pa nuestro avío,

y con tantos parneses

va a echar buen pelo

Villar del Río.

Traerán divisas pá quien toree

mejor corría,

y medias y camisas

pá las mositas más presumías."

Ambos lo pasaron muy bien, se ve en las fotos, y es fácil entender la alegría de Morales y su contento sorprendido por el agasajo postinero, rematado con la condonación de la deuda. Durante la comparecencia, Evo Morales agradeció las atenciones con un discreto regüeldo, como se acostumbra en algunas culturas:

"Nunca imaginé que iba a estar en el Palacio Real, antes un centro de decisiones para invadir, ahora un centro para recibir al invadido".

Y habrá quien siga sosteniendo que carecemos de política exterior.